Inteligencia Adaptativa y Éxito Profesional
¿Es la inteligencia una competencia que nos ayuda a ser mejores profesionales? Parece que todos estamos de acuerdo en afirmar que es así. Sin embargo, es el concepto de inteligencia en sí lo que deberíamos matizar a la hora de hacer esta afirmación.
Los primeros intentos de medir la inteligencia se consolidaron con la definición del Coeficiente Intelectual. En 1905, el psicólogo francés Alfred Binet desarrolló la primera herramienta para medir la inteligencia de los niños a partir de las habilidades cognitivas y el rendimiento académico. La popularidad de este Coeficiente Intelectual fue adoptada por el mundo laboral, que convirtió las habilidades cognitivas y el rendimiento académico en la llave de acceso a la vida profesional desde las actividades de reclutamiento y selección hasta las de promoción y evaluación del desempeño.
Pronto comenzaron a aparecer las limitaciones de este enfoque, pues reducir el encaje en el mundo laboral al conocimiento académico suponía ignorar otros aspectos igualmente importantes de la inteligencia como las competencias, las habilidades blandas o los enfoques posteriores en torno a inteligencias alternativas al mundo académico (inteligencias múltiples). Sin embargo, hasta la década de los 80, no comienzan a incorporarse estos enfoques. Con la publicación de su libro Inteligencia Emocional, Daniel Goleman muestra que la inteligencia no se limita a la capacidad cognitiva, sino que también abarca la habilidad para comprender y gestionar las emociones propias y de los demás. Desde ente enfoque, al concepto de inteligencia se le añadieron otras competencias diferentes a la inteligencia cognitiva como es el caso de la empatía, la autorregulación emocional y las habilidades interpersonales.
Conforme avanzamos en el siglo XXI, encontramos un nuevo matiz a la hora de entender la inteligencia: la inteligencia no es estática, sino que puede desarrollarse y adaptarse a diferentes contextos y situaciones. Así, aparece el concepto de la inteligencia adaptativa: la capacidad de aprender, desaprender y reaprender es esencial en un mundo en constante cambio. Las personas con inteligencia adaptativa son ágiles en su pensamiento y pueden aplicar conocimientos y habilidades en una variedad de escenarios, ya que están dispuestas a aprender y adaptarse a nuevas situaciones. Además, la inteligencia adaptativa también abarca la capacidad de utilizar tecnologías y herramientas digitales para mejorar el proceso de toma de decisiones y la resolución de problemas.
Pero, ¿cómo comenzar a trabajar tu inteligencia adaptativa? el Doctor Brendan O´Brien considera que detrás de la inteligencia adaptativa existe un mindset y un conjunto de competencias basadas en la flexibilidad que podemos gestionar a nivel profesional y personal.
Detrás de esta flexibilidad está nuestra capacidad de no aferrarnos a aquellas estrategias, creencias o formas de trabajar una vez que éstas han dejado de lograr sus resultados, así como de estar abiertos a esa nuevas ideas que sí nos permiten alcanzarlos mediante una actitud dedicada a aprender y desaprender.
También podemos trabajar la inteligencia adaptativa desde otras actitudes. Una de ellas es la curiosidad, un tesoro que nos permite poner el foco en aquellas cosas que han dejado de funcionar y en la búsqueda aquellas nuevas ideas que sí lo hacen. Otra es la tolerancia al fracaso, esa fuerza que nos ayuda a soportar el error y replantearlo como una oportunidad para aprender. Finalmente, la capacidad de diferir recompensas nos ayuda a aceptar cierto disconfort en el presente en espera de grandes recompensas en el futuro.
Por último lugar, hay dos factores que nos ayudan a adaptarnos al entorno: la resiliencia como energía que nos ayuda a recuperarnos de las adversidades y la capacidad de resolución de problemas pues ésta es la fuerza que nos ayuda a abordarlos
Piensa en los cambios que ha experimentado tu vida profesional en los últimos 24 meses. Piensa en cómo están transformado tu organización y cómo interactuará con los cambios que experimentaremos en los próximos meses. Tu capacidad de adaptación a estos cambios será fundamental para lograr tus metas. Desde hoy, puedes comentar a trabajar tu inteligencia adaptativa.
Merece la pena
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