Cómo definir tu estrategia de carrera cuando ya has dejado de ser un principiante


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Es posible que cuando iniciaste tu carrera profesional tenías un gran desconocimiento del mercado laboral. No tenías experiencia previa, por lo que no sabías conducirte por el mundo de las organizaciones, de los equipos, de los objetivos, de los indicadores de desempeño o de las reuniones con clientes, proveedores y colaboradores.

Relájate: la buena noticia es que tras todo este recorrido has mejorado tanto como profesional y como persona. Tu mindset se ha ido actualizando de manera continua en un proceso de aprendizaje/desaprendizaje donde has ido descubriendo qué cosas te funcionan y cuáles no. Gracias a esto ya tienes parte del trabajo hecho para abordar tus próximas aventuras profesionales.

Sin embargo, ten cuidado. La idea de que te has consolidado profesionalmente puede ser muy peligrosa, pues te puede llevar a instalarte en una zona de confort y a una falsa percepción de seguridad. El mercado laboral presente muestra que la mayor parte de los trabajadores atravesaremos a lo largo de nuestra vida diferentes episodios profesionales, por lo que es preciso que usted te encuentres preparado cuando tu posición actual haya agotado su recorrido.

Prepararte para ello no es responsabilidad de tu jefe, ni de tu director de Recursos Humanos. Es una responsabilidad totalmente suya. Además, el momento adecuado es ahora: no necesitas esperar a encontrar el libro adecuado que le muestre el camino, ni a asistir a un taller que te permita iniciar el itinerario. Puedes empezar ahora mismo.

El proceso lo podemos resumir en breves líneas: necesitas conocerse a tí mismo, identificar las metas de carrera que más se ajustan a tus necesidades y capacidades, definir una estrategia y, finalmente, implementarla haciendo un seguimiento y una evaluación de los logros que vas obteniendo.

Pero, por favor, no omitas el primer paso: el autoconocimiento es la parte más importante del proceso. A pesar de ser la casilla número uno, es lo primero que olvidamos cuando estamos en una transición. Se trata de identificar cuáles son tus fortalezas, tus áreas de mejora, tus habilidades, tus intereses y tus valores. No pases por alto este ejercicio, pues es posible que usted ya te encuentre en la segunda mitad de su vida laboral y trabajar en una posición que no es coherente con todos estos elementos puede ser un infierno

A partir de este ejercicio ya puedes comenzar a trazar una estrategia, también puedes definir y gestionar la marca personal de ese profesional que ofreces en el mercado. Puedes identificar si precisas iniciar algún itinerario formativo antes de dar el paso y también puedes poner a trabajar a esa red de networking que ha ido construyendo a lo largo de su vida profesional

Es toda una aventura. Y merece la pena

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